El carrito está vacío Miopía
La miopía se produce por tener un globo ocular más largo de lo normal o en algunos casos por una curvatura excesiva del cristalino.
De esta manera provoca desenfoque o mala visión, síntoma característico de la miopía.
Solución:
La visión borrosa producida por un ojo miope se corrige, ya sea con gafas, lentillas o cirugía.
Sin emabrgo, la miopía no se cura, tan solo puede prevenirse o ralentizarse. Para ralentizar el crecimiento de la miopía es necesario ponerse en manos de un optometrista u oftalmólogo especializado en el control de la miopía.
Hipermetropía
La hipermetropía aparece cuando los objetos cercanos se ven borrosos.
Se presenta cuando la forma del ojo que es más corta de lo normal, hace que la luz se enfoque por detrás de la retina (una capa de tejido sensible a la luz en la parte de atrás del ojo) en lugar de directamente en la retina.
La hipermetropía que aparece en edades tempranas a veces, debido al crecimiento, puede desaparecer.
Solución:
La visión borrosa y cansancio ocular que causa la hipermetropía se puede corregir con gafas, lentillas monofocales o cirugía.
Astigmatismo
El astigmatismo es bastante común que la visión se manifieste de forma borrosa o distorsionada.
Este hecho ocurre porque la córnea (la capa transparente en la parte frontal del ojo) o el cristalino (una parte interna del ojo que ayuda a enfocar) tiene una forma anormal.
Solución:
La corrección del astigmatismo se consigue con gafas, lentillas monofocales o cirugía.
Presbicia
La presbicia es la pérdida gradual de la capacidad de los ojos para enfocar objetos cercanos. Se trata de una parte natural y a veces molesta del envejecimiento.
Por lo general, la presbicia empieza a notarse entre los 40 y 45 años y continúa empeorando hasta alrededor de los 65 años.
Solución:
Como aliado único, adquirir unas gafas monofocales o progresivas puede ayudarnos con las molestias que nos provoca la presbicia.